11.000 nuevas becas y tres nuevos cursos en español para cursar los Certificados Profesionales de Google sin dejar a nadie atrás
Formarse, reorientar o retomar una carrera laboral y cumplir un sueño son algunas de las razones que llevaron a Alba Bermúdez, Carlos González o Iago Lores a solicitar una beca para cursar uno de los Certificados Profesionales que Google lanzó el pasado año en colaboración con el Gobierno de España, a través del SEPE, Fundae, Ministerio de Trabajo y Economía Social, y con diferentes ONGs locales de la mano de INCO.
Tras superar su formación, Alba, Carlos, Iago y Yaiza no solo han incrementado sus conocimientos en tecnología y digitalización, sino que han encontrado las herramientas para hacer frente a un mercado laboral con alta demanda en competencias digitales y han encontrado trabajo.
La forma en la que trabajamos está en constante cambio - a nadie se le escapa que la pandemia ha acelerado estos cambios - y no cabe duda de que la digitalización es una parte instrumental importante para adaptarse a ello. Según el Plan Nacional de Competencias Digitales, casi la mitad de la población española (el 43%) carece de competencias digitales básicas y un 8% jamás ha usado internet.
Abordar estos desafíos presentes pero que impactan directamente en el futuro del trabajo requiere la colaboración entre gobiernos, empresas, sociedad civil, y organizaciones comunitarias. Gracias a la colaboración público-privada, podemos avanzar juntos en una mayor inclusión en el mercado laboral, acercando a las personas que no tienen un fácil acceso a la formación digital y a las empresas expertas en tecnologías y digitalización
Por eso hoy seguimos trabajando estrechamente con Gobierno, agentes sociales y ONG’s para seguir ofreciendo oportunidades a las personas en situación de desempleo o riesgo de inclusión laboral.
Hoy anunciamos 11.000 nuevas becas en España, que se suman a las 5.000 que ya anunciamos el año pasado, para cursar los Certificados Profesionales de Google sin dejar a nadie atrás. Estas becas destinadas a SEPE, FUNDAE y las ONGs: Factoría F5, Fundación Esplai, Fundación FAD Juventud, Open cultural Center / Migracode, Fundación Secretariado Gitano, FELGTBI+ están dirigidas a personas en situación de desempleo o que pertenezcan a colectivos vulnerables, para que tengan la oportunidad de acceder a formación de calidad relacionada con algunas de las áreas donde más demanda laboral existe. Anunciamos también la disponibilidad de tres certificados para cursar en español ‘Análisis de Datos’, ‘Diseño de Experiencia de Usuario’ y ‘Gestión de Proyectos’, que se suman al de ‘Soporte en Tecnologías de la Información’, ya disponible en español desde 2021. Los certificados están disponibles para todas las personas interesadas a modo de una tarifa plana a través de la plataforma Coursera.
Desde 2015, Google ha ayudado mediante diferentes iniciativas, programas y formación gratuita a más de 17 millones de personas y negocios en Europa, Oriente Medio y África a formarse en competencias digitales y más de 4 millones han encontrado trabajo, crecido profesionalmente o creado su propia empresa. En España, hemos formado a más de un millón de personas en habilidades digitales, de ellas, el 15% ha encontrado trabajo, crecido en su carrera profesional o reportado crecimiento en ganancias o número de clientes.
Empresas privadas, organismos públicos y agentes sociales, estamos consiguiendo que cada vez más personas muestren interés en la formación en competencias digitales, en la tecnología y en la digitalización. De la mano de SEPE, Fundae e INCO trabajamos cada día para democratizar el acceso a la formación digital y crear nuevas oportunidades a aquellas personas que lo tienen más difícil.
En contextos socioeconómicos complejos, como los que vivimos actualmente, es más necesario que nunca seguir construyendo puentes y empoderar a los ciudadanos y trabajadores con herramientas y conocimientos que les permitan desarrollarse. Las experiencias de Alba Bermúdez, Carlos González e Iago Lores así lo demuestran. Las habilidades digitales pueden favorecer la inclusión, al tiempo que impulsar el crecimiento económico.